El novillero de raíces corellanas ha tenido petición del segundo trofeo en el cuarto pero el palco no ha cedido.
Ganado: Cinco utreros de Guadalest, terciados, nobles y de escasas fuerzas, y uno, el sexto, de La Interrogación, complicado.
Novilleros: Toñete (vuelta y oreja con petición de la segunda), Marcos (saludos y oreja) y Alfonso Ortiz (ovación tras aviso y silencio).
Lugar y fecha: Plaza de toros La Tercera, de San Sebastián de los Reyes (Madrid). 30 de agosto.
Incidencias: Un cuarto de plaza. Segunda de feria.
Toñete ha abierto plaza con un novillo noble y de poca fortaleza al que el joven torero ha muleteado con delicadeza y mucho pulso. El temple ha surtido efecto y al final de faena han surgido dos series con la mano zurda de excelente trazo. Se ha pedido una oreja, que el palco no ha concedido. Otra le ha escamoteado en el cuarto, al que ha vuelto a torear con exquisita parsimonia. Novillo enclasado, de medida pujanza, que ha roto para delante gracias al trato que le ha dispensado su lidiador, que de nuevo ha subido el diapasón de su faena al natural. Faena de peso. Premio rácano.
Marcos ha puesto actitud ante el segundo, novillo noble al que el torero madrileño ha muleteado con facilidad y recursos en una faena de mucho oficio. La fea travesía de la espada le ha restado premio. El quinto se ha parado, y Marcos no ha dudado en acortar distancias, incluso hasta echar las rodillas al suelo, para que aquello prendiera. Se ha llevado una voltereta pero también una oreja en recompensa a su esfuerzo.
También la espada ha restado premio a Alfonso Ortiz en el tercero. Ha andado resuelto el torero de Tielmes frente a un utrero dócil y feble, al que ha asentado con tablas y ha corrido la mano derecha con criterio. El sexto ha sido un parche de La Interrogación más serio y también más complejo. Por el novillero no ha quedado, siempre muy dispuesto, pero sin material adecuado para voltear la balanza a su favor. Ha vuelto a marrar a espadas y el público ha guardado silencio.