SUEÑOS DE TAUROMAQUIA

María Franco ante su cartel de la Feria del Toro 2011. Fotografía: J. A. Goñi

María Franco, autora del cartel de la Feria del Toro de este año, protagoniza en Pamplona, en el Palacio del Condestable una muestra de 48 obras que tienen en común dos aspectos: la temática taurina y estar elaborados con las manos, no con los pinceles

La autora del cartel de la Feria del Toro de San Fermín 2011 es también la protagonista de la exposición Sueños de Tauromaquia, inaugurada ayer en el Palacio del Condestable. La muestra está formada por 48 cuadros de distintas técnicas y formatos, si bien todos ellos tienen el común la temática taurina y la fuerza del color. Otra de sus particularidades es que todas las pinturas están realizadas con las manos ya que la artista apenas utiliza los pinceles.

Un recorrido por la exposición permite contemplar una pintura expresionista y gestual, en la que destaca la importancia del rojo en cada una de las obras. Rojo pasión, rojo clavel, rojo sangre… Un color que a María Franco le permite dotar a sus obras de fuerte expresividad, vitalidad y ambiente taurino con el fin de que el espectador se adentre en un mundo cargado de emociones taurinas. Sueños de tauromaquia, por tanto, combina la pintura lírica con la más enérgica, en la que formas y trazos surgen al ritmo del toro y los toreros.

Emocionar con la pintura

María Franco, descendiente del poeta Rafael Alberti, se interesó por la pintura desde joven. Artista plástica reconocida a nivel nacional e internacional, la artista ha participado en distintas exposiciones y su o bra se encuentra principalmente en España, Italia, Francia, Alemania, Estados Unidos y Cuba. En su periplo por las salas de exposiciones de España, parte de la obra de María Franco llega a Pamplona, una ciudad que la artista definió como «tierra de toros, una tierra muy pasional».

La pintora explicó que las obras expuestas en Pamplona pertenecen a una serie que se gestó hace año y medio, cuando la pintora comenzó a asistir a corridas de toros y se adentró en el mundo taurino. “El Fandi tiene la culpa de que esté aquí. Indagué en la tauromaquia, asistí a mi primera corrida de toros y todo ello, junto a la huella que dejan algunos toreros, despertó en mí emociones y sensibilidades que tenía dormidas”.

La artista añadió que los 48 cuadros de la muestra reflejan distintas secuencias que se viven en una plaza de toros. Prueba de ello es un cuadro que refleja el típico paseíllo del algüacilillo en la plaza, secuencias sobre los tendidos, el ruedo o el frente a frente del toro y torero. La exposición también recoge pinturas en las que la artista interpreta a toreros como Morante de la Puebla, José Tomás, Julio Aparicio o Serafín Marín “por todo lo que me han hecho sentir”.

María Franco indicó que concibe la pintura alrededor del color, algo que no falta en sus cuadros taurinos en los que, por ejemplo, las astas de los toros y las monteras de los toreros derrochan colorido. “Mi pintura derrocha libertad y lo muestro con esos cuernos de colores. Para mí la pintura es un medio de expresividad y libertad y es lo que plasmo en mis cuadros”.