A este buen utrero jabonero le cortó Armendáriz una oreja.
La materia prima y el rejón de muerte le privaron de su quinta puerta grande consecutiva.
Ganado: Seis utreros de Hermanos González Rodríguez, de juego decepcionante por parados y reservones, salvo el segundo, que se dejó, y el sexto, de buen juego.
Rejoneadores: José Miguel Callejón (oreja en ambos), Joao Moura hijo (dos orejas y oreja), Roberto Armendáriz (ovación y oreja).
Lugar y fecha: plaza de toros de Navas del Rey (Madrid). 31 de agosto.
Incidencias: Media plaza. Callejón, que sustituyó a Miguel Moura, y Moura junior salieron a hombros.
Roberto Armendáriz no pudo lograr ayer en la plaza madrileña de Navas del Rey su quinta puerta grande consecutiva, pues el primero de su lote resultó muy deslucido y frente al que cerró plaza falló con el rejón de muerte.
El caballero de Noain se encontró en primer lugar con un ejemplar completamente rajado, que se echó dos veces sobre la arena. Lo recibió con Señorita, con la que le castigó con un rejón. Para banderillas, optó por Prometido, que puso toda la carne en el asador y completó el tercio de banderillas. Para el final del trasteo, el navarro eligió a Cristal, con el que se lució con las cortas y mató de un rejonazo. El rejoneador estuvo muy por encima del manso y el público agradeció su esfuerzo con una cálida ovación.
El panorama cambió con la salida del sexto y último, un bonito jabonero de buen juego. Armendáriz lo aprovechó desde el principio y cuajó una faena de altos vuelos, primero con El Cañito, con el que puso un rejón de castigo. En banderillas, destacó primero con Grano de Oro, con su parsimonioso toreo de costado y, después, con Polvorilla y su característico estilo, cara a cara, ofreciendo el pecho, en mínimos terrenos. Para el tercio final, volvió a sacar a Cristal, con el que hizo vibrar con tres cortas sin respiro y espectacular par a dos manos. Pero el navarro no anduvo certero con la hoja de peral, pinchó y el premio se redujo a sólo una oreja.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX