Momento en el que ‘Primorosa’ alcanza a un corredor, en el que fue el mayor percance del enecierro. Fotografía: Galdona.
La carrera, con vacas de Vicente Domínguez, de Funes, concluyó a loa quinces minutos de su inicio.
La tranquilidad que se respiraba entre los miembros de la ganadería Vicente Domínguez (Funes) tras un encierrillo sin sobresaltos desapareció por completo durante el primer encierro del Pilón. Duró alrededor de 15 minutos debido a que una de las vacas más jóvenes, Primorosa, con el número 228 y de cuatro años y medio, no hizo honor a su nombre y antes de llegar a los corrales se dio la vuelta y corrió a la inversa, protagonizando un encierro no precisamente delicado.
A pesar de los momentos de tensión, en total fueron siete las personas atendidas por contusiones leves. “Llevamos desde 2008 sin venir y estoy un poco nervioso. Ojalá todo salga bien”, comentaba Vicente Domínguez minutos antes de que comenzase el encierro sin imaginar lo que ocurriría después.
La manada comenzó el descenso de forma lenta y conjunta hasta que en la primera curva empezó a estirarse. Desde este momento, Primorosa ya comenzó a quedarse atrás y a hacer además de buscar otra salida. La velocidad aumentó como es habitual en la última bajada, en la que se produjeron varias caídas de mozos.
La de uno de camiseta naranja fue de las más agresivas, pero quizás por ocurrir a la altura de la hornacina de la Virgen de la Nieva, como comentaban algunos vecinos, la cogida sólo se quedó en susto.
Llegó el turno de la protagonista, Primorosa. Al final de la cuesta, a la altura del puesto de prensa se detuvo y se giró emprendiendo su carrera de nuevo hacia arriba. Varios mozos la citaron para que se diese la vuelta, pero no surtió efecto.
El animal arremetió contra un peñasco y el vallado, provocando que un joven pastor cayese desde una altura de unos 12 metros al barranco de zarzas junto con su capote azul y rosa. Los gritos se despertaron entre los asistentes, pero el joven tan sólo tuvo una contusión leve en la cadera y llegó consciente a la ambulancia con la ayuda de la DYA.
Los ganaderos decidieron sacar al manso para tratar de reconducir a Primorosa hasta los corralillos, pero ésta hizo caso omiso a su compañero. Fue entonces cuando arremetió contra un hombre que se encontraba en el peñasco y este cayó al recorrido
Al menos una docena de mozos se abalanzaron sobre el animal para intentar reducirlo y evitar que cornease al joven. Fue necesario colocarle un pañuelo rojo en los ojos para arrastrarla hasta los corrales. “Al ser una vaca joven es más probable que pase algo así, suelen estar más perdidas y más en recorridos como este. Pero no esperaba para nada lo que ha pasado. Ha sido un esfuerzo venir después de tanto tiempo y más habiendo estado ayer mismo en Tarragona”, comentó el ganadero Juan Carlos Domínguez, quien tuvo que ver lo sucedido tras el encierro en imágenes.
Refuerzo sanitario
“Ha sido bastante peligroso. No sé cómo no ha pasado algo más grave, menos mal”, comentó José Manuel Merenciano Moreno, el representante del equipo médico de la DYA, todavía sobresaltado tras el encierro. Merenciano explicó que este año previó una gran cantidad de gente en los encierros y quiso reforzar el servicio, siendo un total de 14 personas las que lo formarán durante todos los Pilones. “Suele ser peor cuando coincide con el encierro de Tafalla. A ver qué pasa mañana (por hoy)”, dijo el sanitario.
Información de Beatriz Díaz para Diario de Navarra.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX