El diestro estellés Francisco Marco se perfila como candidato para sustituirle.
Manolo Rubio, veterano subalterno cogido el viernes pasado en la plaza de Las Ventas cuando iba a apuntillar un toro de Victorino Martín, sufre una grave lesión en la rodilla derecha que le impedirá estar recuperado el 7 de julio para ejercer como doblador de los encierros de San Fermín, función que ejerce desde hace treinta y siete años.
Según el parte médico emitido el mismo viernes por el doctor Máximo García Padrós, el torero de plata fue atendido de una “luxación completa de rodilla derecha, que provoca la rotura de todos los ligamentos (‘pentada’) y herida por asta de toro en periné, con orificio de entrada y salida, de 15 centímetros, que alcanza el pubis, contusiona el recto y la uretra. Pronóstico grave”.
Ante tal situación, el diestro estellés Francisco Marco se perfila como el candidato a sustituir como doblador al veterano banderillero, que toreaba a las órdenes de Antonio Ferrera; esto significa que tampoco podrá hacer el paseíllo el día de San Fermín como parte de la cuadrilla del matador de toros pacense, que se enfrentará a un lote de toros de Torrestrella.
Francisco Marco ya ejerció de doblador hace dos años, cuando tuvo que sustituir al lodosano Manu Rodríguez, que se recuperaba de una rotura de ligamento cruzado y de menisco que sufrió cuando toreaba en Zaragoza.
En este sentido, el presidente de la comisión taurina de la Casa de Misericordia, José María Marco, reconoció ayer que Marco, en principio, parecía el más capacitado. “Todavía no hemos tomado una decisión ante la baja de Manolo Rubio, pero no cabe duda que Marco cuenta ya con experiencia y, a priori, parece el torero más cualificado para torear como doblador”, aseguró.
Manolo Rubio, de 64 años, nació en la localidad albaceteña de Villarrobledo pero se afincó en Pamplona cuando todavía era un chaval. Y fue en la capital navarra donde tomó la alternativa en 1974 -19 de abril- de manos de Ricardo de Fabra. Cuatro años después, cambió el oro por la plata y pasó a engrosar las filas de los subalternos, donde alcanzó prestigio por su buen hacer. Su faceta como doblador la inició en 1977, por lo que actualmente es el más veterano de un equipo completado por Sergio Sánchez, Manolito de los Reyes y Manu Rodríguez, todos ellos navarros.