Cosos permanentes, desmontables o improvisados se preparan para las fiestas patronales.
Este mes de julio la temporada taurina entra en todo su apogeo con el inicio de las fiestas de las localidades de Tierra Estella y, con este motivo, recorremos algunos de los escenarios que acogen este tipo de festejos en la merindad. Aunque no es habitual encontrar estas arquitecturas como un edificio más del paisaje urbanístico son tres -Estella, Lodosa y Mendavia- los municipios que cuentan con una plaza permanente entre sus construcciones.
Inaugurada el 2 de septiembre de 1917 –casi cinco años antes que la de Pamplona-, la plaza de toros de Estella se prepara estos días para los festejos que tendrán lugar durante las fiestas que comenzarán el próximo viernes día 31. Siete empleados municipales se encargan de reponer los tableros estropeados, pintar y arreglar el graderío y los 20 palcos que darán cabida a 3.500 espectadores.
Lodosa, ruedo estrella
La plaza de toros de Lodosa será, este año, la gran protagonista ya que será el escenario del XII Congreso Nacional del Toro de Cuerda, que tendrá lugar los días 4, 5 y 6 de septiembre. Más de 40.000 personas visitarán la localidad ese fin de semana. Por ello, el ayuntamiento ha comenzado las obras de mejora tanto en el interior como en el exterior del coso. Además de cementar el suelo de los corrales, para mantener más limpio al ganado, se colocará un burladeromás que quedará integrado en la entrada. “Al año se destinan de los presupuestos 5.000 euros para el mantenimiento de la plaza”, explicó el alcalde, Pablo Azcona.
Mil ochocientos espectadores copan el aforo de este coso de tercera categoría que se construyó en 1970. “El reclamo del toro con soga llena la plaza, es el más popular. Le siguen los espectáculos sin muerte, a los que acuden entre 600 u 800 personas cada día. La lidia tiene menor poder de convocatoria, aunque atrae a unos 400 aficionados por jornada”, añadió Azcona.
En Mendavia, la plaza de toros permanente, inaugurada hace 39 años, pertenece a la Asociación Taurina Nuestra Señora de Legarda. Posicionada entre las más numerosas de Europa, la entidad cuenta con 2.000 socios , más de la mitad de la población (3.616 habitantes), lo que permite mantener el número de festejos y actividades del colectivo que preside Gustavo Alegría Santamaría desde febrero, con Raquel Elvira Verano al frente de la secretaría. “Las cuotas son de 15 euros anuales y con ese presupuesto, más una subvención municipal, organizamos seis capeas un encierro y dos almuerzos populares”, detalló.
Con un aforo para 1.400 aficionados, esta plaza abrió el calendario de festejos el 1 de marzo con una capea y continuará el 16 de agosto con un encierro y un almuerzo con motivo de la festividad de San Roque. Durante las fiestas patronales de agosto el programa taurino municipal se traslada a una plaza desmontable instalada en la plaza de Los Fueros donde el cartel se suma a los encierros por las calles de la localidad.
Las portátiles, las más demandadas
El resto de localidades apuesta principalmente por instalar estructuras desmontables que ocupan el terreno solo el tiempo necesario para la celebración de los espectáculos. Están construidas con elementos de madera, metálicos o sintéticos. Al igual que las permanentes, deben cumplir las exigencias de seguridad e higiene establecidas por la normativa vigente.
San Adrián es uno de los municipios que apuesta por este tipo de infraestructuras. En 1998 decidió, junto a Andosilla, Valtierra y Castejón, adquirir una plaza portátil mancomunada que costó casi 155 mil euros, de los que casi una tercera parte subvencionó el Gobierno de Navarra. El 25 de julio de ese mismo año se estrenó la arena con una lidia de toros enviados por el Marqués de Albaserrada, una corrida que casi llenó el tendido con una capacidad para 2.000 espectadores.
Su almacenaje cuesta, aproximadamente, 1.200 euros por localidad, más otros tantos cada tres o cuatro años para el mantenimiento. Diecisiete años después, sólo San
Adrián hace uso pleno de la infraestructura -Valtierra sigue utilizando los corrales- . Durante diez días, ocho miembros de la brigada municipal han dejado listo el coso que ayer arrancó su temporada con una capea organizada por los quintos de 2017. “Es una muy buena plaza y preparada para festejos taurinos”, calificó Emilio Cigudosa, alcalde de la localidad.
Andosilla dejó de utilizarla en 2011, cuando optó por delegar esta tarea en una empresa de organización de festejos taurinos, una alternativa que secundan otras localidades, como Azagra. Según el primer edil, Manuel Teres, la plaza adquirida no se ajustaba a las necesidades de la localidad. “La capacidad es muy superior a la asistencia que mantiene Andosilla, 900 personas al día”, amplió Teres.
El precio es otro de los inconvenientes que ha inclinado a Andosilla a cambiar de alternativa. “En 2010 el coste de la plaza para el consistorio fue de 33.040 euros, por lo que había que marcar los abonos en 40 euros, 35 para jubilados y 20 para los niños, vendiendo las entradas individuales a 15 euros”. Según Teres, con el nuevo sistema el coste total supuso, en 2014, 14.520 euros, una rebaja de más de la mitad del presupuesto inicial que permitió sacar los abonos a la venta por un importe inferior. “La plaza que instalan tiene una capacidad para 1.200 personas. Los espectáculos son sin muerte y tienen más éxito y convocatoria”, concluyó Teres que animó a otras localidades a comprar la parte del municipio en la infraestructura mancomunada.
Viana, Coso por coso
Pero en Tierra Estella, ningún municipio se queda sin plaza de toros. Los espectáculos taurinos son el principal reclamo de la fiestas y varias localidades optan por adaptar a la normativa plazas o cosos que, durante el resto del año, son el núcleo de la actividad diaria.
Es el caso de Viana que el próximo día 21 dará inicio a las fiestas en honor a la Magdalena y a Santiago. Para la ocasión, el Ayuntamiento transforma la plaza del Coso en un auténtico ruedo que mañana lunes tendrá ya puesta la arena. Patio de cuadrillas, toriles, chiqueros y puerta grande. Lo tiene todo, incluso una andanada de honor en el balcón de toros y un graderío.
Información de Susana Esparza para Diario de Navarra.