Por primera vez, herró los añojos a nitrógeno, con lo que la marca se hace más visible
En su faceta de ganadero de bravo, Pablo Hermoso de Mendoza llevó a cabo recientemente en su finca de Estella el herradero de sesenta y una reses, de las que veintiuna fueron machos y cuarenta hembras, procedentes de vacas de Osborne y de un macho de Daniel Ruiz. Todas ellas fueron marcadas con su hierro y con el guarismo 0, correspondiente a 2010, año de nacimiento del ganado.
Como en años anteriores, la mayoría de las reses fueron marcadas en el cajón, pero para herrar algunas de ellas se optó por el sistema a la vieja usanza: echándolas al suelo y amarrando sus extremidades.
El herradero fue presenciado por varios amigos del caballero estellés y, sobre todo, por muchos niños, que participaron activamente en el herraje del ganado, bajo las órdenes del rejoneador. La principal novedad de este año residió en que los machos fueron herrados a nitrógeno, con lo que la marca se hace mucho más visible.